no creo en los sacerdotes

Hace unas semanas fui al autolavado. Llegué, tomaron mi carro, me dieron un ticket y me invitaron a sentarme en una pequeña sala de espera, vacía, salvo por un hombre y una mujer que se sentaban juntos. Saqué el teléfono para checar Facebook o Twitter. Llevaba puesto el cuello romano y me di cuenta de […]

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